No tenemos perdón: Las diez técnicas de manipulación mediática según Chomsky

viernes, 17 de agosto de 2012

Las diez técnicas de manipulación mediática según Chomsky

  1. La técnica de la distracción. Es el elemento primordial del control social que consiste en desviar la atención del público de los problemas importantes y de las decisiones de las élites políticas y económicas mediante la técnica del diluvio con continuas distracciones e informaciones insignificantes. Es igualmente indispensable para impedir al público interesarse por conocimientos esenciales en el área de la ciencia, la economía, etc. ”Mantener al público ocupado, ocupado, ocupado, sin tiempo para pensar; de vuelta a la granja como los animales (Armas silenciosas para guerras tranquilas).”
  2. Crear problemas y después ofrecer soluciones. También llamado“problema-reacción-solución”. Se crea una situación para causar cierta reacción en el ciudadano a fin de que mandante las medidas que los líderes desean hacer aceptar. Ejemplo: dejar que se desenvuelva la violencia urbana u organizar atentados para que el ciudadano demande leyes de seguridad en perjuicio de la libertad. O crear una crisis económica para que la ciudadanía acepte, como un mal necesario, el retroceso de los derechos sociales y el desmantelamiento de los servicios públicos.
  3. La técnica de la gradualidad. Se utiliza para hacer que se acepte una medida inaceptable, aplicándola gradualmente durante años. Así se impusieron condiciones socioeconómicas como el neoliberalismo durante los 80 y 90: Estado mínimo, privatizaciones, precariedad laboral, desempleo masivo, bajos salarios, etc. Tantos cambios aplicados de una sola vez hubieran provocado una revolución.
  4. La técnica del diferimiento. Otra manera de hacer aceptar una decisión impopular es presentarla como “dolorosa y necesaria” obteniendo la aceptación pública en el momento para una aplicación futura. Es más fácil aceptar un sacrificio futuro que un sacrificio inmediato porque el esfuerzo no es empleado inmediatamente y porque la gente tiene la tendencia a esperar que “todo irá mejor mañana” y que el sacrificio podrá ser evitado. Esto da tiempo para acostumbrarse a la idea del cambio y para aceptarla con resignación cuando llegue el momento.
  5. Tratar al público como menor de edad. La mayoría de la publicidad utiliza argumentos y personajes particularmente infantiles, como si el espectador fuese menor de edad. Cuanto más intenso sea el deseo de engañar al espectador mayor es el tono infantil adoptado. “Si uno se dirige a una persona como si tuviese 12 años tenderá, en razón de la sugestión, a una reacción desprovista de sentido crítico, como la de un niño de 12 años (Armas silenciosas para guerras tranquilas)”.
  6. Uso de la emoción por encima de la reflexión. Es una técnica clásica para corto circuitar el análisis racional y el sentido critico. La utilización del registro emocional abre la puerta de acceso al inconsciente para implantar ideas, miedos y temores o inducir comportamientos.
  7. Mantener a la ciudadanía en la ignorancia y la mediocridad. Hacer que sea incapaz de comprender las tecnologías y los métodos utilizados para su control. “La calidad de la educación dada a las clases sociales inferiores debe ser la más pobre y mediocre posible de forma que la distancia que cree entre las clases inferiores y las clases sociales superiores sea imposible de reducir para las clases inferiores (ver ‘Armas silenciosas para guerras tranquilas)”.
  8. Estimular al ciudadano a ser complaciente con la mediocridad. Hacer creer que es moda el hecho de ser estúpido, vulgar e inculto…
  9. Reforzar la culpabilidad. Hacer creer al individuo que es él el culpable, por su propia desgracia, por la insuficiencia de su inteligencia, sus capacidades o esfuerzos. Así, el individuo se auto desvalida y se culpa, que genera un estado depresivo, uno de cuyos efectos es la inhibición de la acción.
  10. Conocer a los individuos mejor de lo que ellos mismos se conocen. En el transcurso de los últimos 50 años los avances de la ciencia han generado una creciente brecha entre los conocimientos del público y los poseídos y utilizados por las élites. Gracias a la biología, la neurobiología y la psicología aplicada, el “sistema” disfruta de un conocimiento avanzado del ser humano. El sistema ha conseguido conocer mejor al individuo de lo que él se conoce a sí mismo. Esto significa que el sistema puede ejercer un mayor control y poder sobre los individuos, mayor que el de los individuos sobre sí mismos.
Noam Chomsky

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